El concepto de etiqueta adhesiva engloba un abanico muy grande de elementos. Todos conocemos las típicas pegatinas utilizadas para promocionar un producto o negocio, pero las posibilidades que tienen son enormes, y en muchas ocasiones es mejor ponerse en contacto con una empresa de etiquetas adhesivas especializada para que nos ayude y nos informen de lo qué necesitamos en cada situación.

Uso de pegatinas y etiquetas adhesivas
Como he mencionado en la introducción, este producto puede utilizarse en numerosos contextos, no sólo para promocionar algo, también para corregir elementos ya existentes, informar de una situación, precintar un paquete o completar una colección de cromos.
No hay que retroceder mucho en el tiempo para recordar el ejemplo, en España, del cambio de velocidad en las carreteras, donde se utilizaron miles y miles de adhesivos para modificar las señales de tráfico de todo el país.
Al ser un elemento tan cotidiano no nos damos cuenta que, nada más salir a la calle, estamos rodeados de etiquetas adhesivas, pero si nos fijamos un poco empezaremos a verlas por todas partes.
Por ejemplo, podemos encontrar etiquetas adhesivas en las botellas de diferentes marcas y bebidas, embalajes, pegatinas en los coches como las de "bebe a bordo" o "ITV", en los paquetes de envío, algunas revisiones de los ascensores, carteles de "prohibido fumar" o indicaciones de dirección", los precios en los supermercados...
Es muy probable que de toda esta información que tenemos a la vista saquemos nuevas ideas para futuros proyectos, o si somos empresarios o emprendedores, nuevas fórmulas de publicidad, sacar rentabilidad o encontrar soluciones que podamos utilizar.

Dentro de la cantidad de productos adhesivos que existen, no voy a entrar en los referentes a grandes formatos, como los vinilos para cristales, escaparates o paredes, y voy a centrarme exclusivamente en las etiquetas adhesivas.
Materiales, impresión y producción de adhesivos
No todas las etiquetas adhesivas son iguales, tampoco se utilizan para lo mismo ni se imprimen igual.
Entramos en un mundo donde las posibilidades son infinitas a día de hoy, y donde podemos elegir entre diferentes procesos de creación y realización tan distintos que posiblemente necesitaremos la ayuda de un profesional en la materia.
Como diseñador gráfico que muchas veces se ha visto frente a esta situación, siempre hay que realizar una pequeña investigación de lo que vamos a necesitar, y esa investigación pasa por ponerse en contacto con la gente o empresa que se encargará de realizar la producción final.
Así sabremos las limitaciones que tenemos a la hora de empezar el proyecto y podrán ayudarnos a ir en la buena dirección desde un principio.
Es posible que necesitemos acudir a otro lugar si no ofrecen lo que necesitamos o adaptarnos a lo que ellos ofrecen.
Aunque esta reflexión parezca fuera de lugar, es importante saber lo que podemos y no podemos hacer para evitar problemas durante el proceso.
Materiales
El avance en la impresión digital ha permitido incluir materiales que hasta ahora era imposible utilizar.
Con materiales me refiero tanto a las tintas o sistemas de color como a los soportes utilizados.
Podemos encontrar etiquetas adhesivas en materiales como chapas de aluminio o metal, cartón, plásticos, papeles de todo tipo, telas y prácticamente cualquier soporte que se nos ocurra.
Dependiendo del soporte elegido se utilizan tintas con diferentes componentes para la impresión y así conseguir una mejor adherencia y permanencia de los colores.
Estos materiales nos dan la posibilidad de elegir cómo debe ser el tipo de etiqueta o pegatina según su utilización.
Por ejemplo, si va a terminar exponiéndose a condiciones climatológicas, utilizaremos un soporte plástico con tintas que soporten mejor la influencia de la luz directa.
Pero si es para colocar el código de barras de la entrega de un paquete postal, con un papel adhesivo normal será suficiente, pues no necesitamos que perdure en el tiempo.

En lo referente a las tintas, es importante saber si la etiqueta adhesiva que utilizaremos será manipulada por alguien o no, ya que no sería de recibo terminar con los dedos manchados por algo que se pensaba que no lo haría.
Es el caso de las pegatinas que ponen a las bolsas de los comercios para que no se abran o las etiquetas de felicitación que se pegan en los envoltorios de un regalo.

Vamos a ver a grandes rasgos algunos de los materiales que más se utilizan.
Papel
El papel es el más recomendado para realizar etiquetas de productos, papelería de identidad corporativa o regalos, entre las muchas posibilidades que existen.
No es recomendable utilizar este soporte para exteriores, aunque podría utilizarse un barniz o plastificado, solo se recomienda en casos de extrema necesidad.
Al ser un material débil, tampoco es el más aconsejado para tamaños muy grandes.
Plástico adhesivo
Se trata de unas láminas de plástico (PVC vinílico) que pueden ser blanco, transparente o de corte. Su utilización dependerá en gran medida de las necesidades y condiciones que necesitemos.

Por norma general aguantan mejor las condiciones de exposición al sol y las inclemencias metereológicas, aunque dependerá de la calidad y composición de este material.
Su uso suele estar destinado para vehículos, bicicletas, ordenadores, escaparates, cristales...
Otros materiales
En ocasiones especiales es posible que nos pidan etiquetas adhesivas para situaciones concretas, como pegatinas en tela o chapas en metal para adherir a ropa, electrodomésticos o superficies sólidas.
Estos materiales requieren un tratamiento especial, sobre todo en el momento de la impresión, ya que la impresión digital o tradicional (offset) no es la adecuada para conseguir los mejores resultados.
Impresión
Las etiquetas adhesivas pueden ser impresas de formas diferentes, muchas veces el tipo de impresión está sujeto al material a utilizar, pero no es la única variable.
Dependiendo de la cantidad a imprimir, puede convenirnos un sistema u otro.
Impresión Offset
Las máquinas offset, aunque permiten un acabado impecable, trabajan con tintas al agua y un sistema de rodillos que impiden la utilización de materiales como la tela o soportes rígidos.

Se utiliza para papeles de diferentes grosores y para uso interior como papelerías o etiquetas de productos.
Está recomendado para tiradas grandes por su alto coste de producción con la posibilidad de crear formas por medio de troqueles que permiten un corte preciso en su terminación.
Impresión Digital
La impresión digital tiene diferentes variantes, desde la impresión láser a la utilización de plotters para grandes tamaños. Dependiendo del soporte a utilizar también se utilizará un medio de impresión diferente.

Permite la impresión de pequeñas cantidades en papel a un precio más económico y con una calidad muy buena, aunque la precisión no siempre es exacta como en una máquina offset.
Es la utilizada principalmente para la impresión de vinilos y pegatinas plásticas, sobre todo para exteriores y superficies extensas.
Otros métodos de impresión
Por último volvemos a esas etiquetas especiales que requieren un tratamiento especial.
Los adhesivos que no se pueden imprimir con los métodos anteriores requieren de máquinas especiales como las de serigrafía o la flexografía, sistemas más caros pero más apropiados para impresiones en materiales alternativos.
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